Chile es el primer país de Sudamérica en comprometer Deforestación Cero para la gestión sostenible de los bosques
6 de marzo de 2025 Asuntos técnicos
Así lo confirma la validación internacional del nuevo estándar de certificación forestal aplicable al bosque plantado del país. La nueva normativa entra en vigencia a partir de marzo 2025 y tendrá un año de transición para su aplicación en el territorio nacional.
PEFC es el sistema internacional de certificación forestal, sin fines de lucro y origen europeo, que ha propuesto nuevos requisitos para la gestión sostenible de los bosques y sus productos derivados, esto en línea con la regulación de la Unión Europea sobre Deforestación Cero para la comercialización de productos de base forestal.
Chile cuenta con un sistema nacional de certificación forestal reconocido hace 21 años por PEFC, que se ha preocupado de aplicar los nuevos requisitos europeos al estándar nacional y liderar así el camino de la deforestación cero.
“Si bien, la certificación forestal en Chile regula la no deforestación y la no degradación de bosques desde el 2000, este ajuste a la normativa nacional hace explicita la prohibición de deforestación y agrega nuevos criterios de verificación para evitar el cambio del bosque a otros fines de uso del suelo, y el reemplazo del bosque nativo por plantaciones desde el 31 de diciembre de 2010 en adelante”, comenta André Laroze, CEO de PEFC Chile.
Actualmente, el país registra 1,1 millones de hectáreas de bosque plantado certificado PEFC. De acuerdo con Laroze, “la certificación cuenta con nueve principios de gestión sostenible, que regulan la relación con trabajadores forestales, comunidades locales, pueblos indígenas, conservación de bosques y áreas de alto valor, protección de la biodiversidad, suelo y agua, cumplimiento de leyes y tratados, y protección de los recursos forestales incluyendo la prevención de incendios”.
El ejecutivo agrega que la principal medida de verificación de que se cumple esta normativa es la auditoría de tercera parte, pero en especial, “para la deforestación cero, se requiere un registro digital en algún sistema de geolocalización que permiten identificar los predios certificados donde se cosecha la madera que entra al mercado. Esta medida facilita además el control del comercio legal de madera”.
A nivel del detalle técnico del estándar, la versión de la normativa recientemente aprobada considera nuevos términos y definiciones alineadas con la hoja de ruta “Deforestación Cero” de la Unión Europea, en especial para la comprensión de los diferentes tipos de bosques, como el bosque plantado.
Valga aclarar que esta regulación es de carácter voluntario y por lo tanto la garantía de deforestación cero será un atributo que solo las empresas y propietarios forestales certificados podrán demostrar, “siendo muy relevante aumentar el acceso a la certificación por los pequeños y medianos propietarios forestales con operaciones comerciales tanto para Chile como para Europa y otros destinos”, concluye Laroze.