ODS 2: Hambre cero
Los alimentos provenientes de bosques, como hongos, nueces o bayas contribuyen de manera importante al suministro de alimentos y a la calidad nutricional de las dietas, especialmente en algunas de las regiones más vulnerables del mundo.
ODS 2: Hambre cero
Objetivos de desarrollo sostenible
Es hora de repensar cómo cultivamos, compartimos y consumimos nuestros alimentos. Si se hace correctamente, la agricultura, la silvicultura y la pesca pueden proporcionar alimentos nutritivos para todos y generar ingresos dignos, mientras apoyan el desarrollo rural centrado en las personas y protegen el medioambiente.
Se espera que la población mundial alcance los 9.700 millones de personas en 2030. Se estima que se necesitará aproximadamente un 70% más de alimentos.
Bosques y ODS 2:
Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y promover la agricultura sostenible
Los bosques contribuyen directamente a la seguridad alimentaria al proporcionar alimentos, suministrar energía para cocinar y mejorar la resiliencia de los sistemas ecológicos y sociales que rodean la agricultura. Los alimentos provenientes de los bosques, como hojas, semillas, nueces, frutas, hongos, miel, insectos y animales salvajes, proporcionan diversidad dietética, incluyendo micronutrientes vitales.
Dado que a menudo los árboles son más resistentes a las condiciones climáticas adversas que los cultivos agrícolas, los alimentos con base en los bosques también sirven como una importante red de seguridad en tiempos de crisis y emergencias.
Los árboles fuera del bosque (AFB) mejoran la capacidad de recuperación de los sistemas ecológicos y sociales que rodean la agricultura, y sirven como oportunidades cruciales de generación de ingresos para los agricultores y pequeños productores. Especialmente en los sistemas agroforestales, los AFB pueden aumentar significativamente la productividad de los cultivos agrícolas.
PEFC y el ODS 2
PEFC protege la disponibilidad de alimentos en los bosques, lo que requiere que los bosques mantengan su capacidad para producir madera y productos forestales no madereros de manera sostenible.
La inclusión de AFB en nuestro último estándar hace que la certificación PEFC sea accesible para los millones de agricultores y pequeños propietarios que no son dueños ni manejan bosques, sino más bien árboles en tierras agrícolas o en asentamientos que previamente estaban fuera del alcance de la certificación.
Esto impacta positivamente en la vida de los pequeños agricultores. Mejora el manejo de los árboles en la agricultura, promueve buenas prácticas agrícolas, al mismo tiempo que aumenta la cantidad de madera disponible para la sociedad proveniente de fuentes gestionadas de manera sostenible.
Criterios y estándares seleccionados de PEFC (abreviado)
6.2.4 El uso anual permitido de productos forestales no madereros debe ser incluido en el plan de manejo a un nivel que pueda tener un impacto en su sostenibilidad a largo plazo.
8.3.1 El estándar requiere que se mantenga la capacidad de los bosques para producir una gama de productos forestales madereros y no madereros de manera sostenible.
8.3.4 El estándar requiere que los niveles de cosecha, tanto de los productos forestales madereros como no madereros, no excedan una tasa que pueda mantenerse a largo plazo, y se debe hacer un uso óptimo de los productos cosechados.
8.6.3 El estándar requiere que las áreas fundamentales para satisfacer las necesidades de los pueblos indígenas y las comunidades locales (por ejemplo, salud y subsistencia) deben ser protegidas.
8.6.4 El estándar requiere que la gestión promueva la salud y el bienestar a largo plazo de las comunidades, con el apoyo del compromiso compartido con las comunidades locales y los pueblos indígenas.
Apéndice 2: Directrices para la interpretación de los requisitos para los Árboles Fuera del Bosque (AFB).
La gestión de los componentes agrícolas dentro de un sistema AFB debe seguir las buenas prácticas agrícolas y las directrices disponibles.